Muchos son los documentales en estos tiempo que nos tratan de mostrar la visión de la historia del pasado, basándose en cosas más o menos ciertas. ¿Quién no ha visto alguna de esas recreaciones virtuales que tanto se usan como recursos en este tipo de explicaciones televisadas? Todas ellas pueden ser más o menos correctas, dependiendo en gran medida de los recursos que hasta el momento pueden poseer, o la línea interpretativa que se vaya a usar. Pero lejos de las recreaciones virtuales, hay una serie de programas altamente interesantes. La serie de los mismos se llama "Ciudades bajo tierra", y no pienso hablar sobre los datos o no que te proporcionan en cada uno de dichos capítulos, sino en la dinámica propia del documental.
La intención de esta serie se centra en mostrar una ciudad desde un punto de vista un tanto particular, pues toda la atención del mismo está en recorrer las cloacas, cuevas y pasadizos que puedan existir en esta ciudad. Así, de las ciudad de Berlín, por ejemplo te mostrará los bunkeres que protegieron a la ciudadanía en la Segunda Guerra Mundial, o en Roma las catacumbas de los primeros cristianos y los restos de la primera cloaca máxima. Esto no es lo que se mostraría en cualquier documental que ver cuando se quiere tener una idea por encima de la ciudad que se va a visitar. No, esta es una imagen que se da y que es importante por dos puntos imprescindibles: la carencia total a estos viaductos, y por otra parte, la posibilidad de ver una arqueología viva.
El primero de los puntos se explica por si solo, por norma general, los accesos a las alcantarillas es algo que además de no interesar en absoluto, está completamente regulado y prohibido. Por eso, poder ver de forma tan directa un lugar así es algo que en pocas ocasiones se tendrá la posibilidad. El segundo punto, sin embargo, es un poco diferente, pues la arqueología es por sí una actividad que necesita de ser desenterrada. En este caso, las actividades arqueológicas y de estudio se han de realizar bajo el nivel de la ciudad actual. Esto es curioso, porque en más de una ocasión nos hemos preguntado cómo se vería la ciudad en épocas pasadas, y hemos descartado la opción de poder observarlas de tal modo, pero aquí es nos da la posibilidad de ver parte de esas antiguas ciudades que descansan bajo nuestros pies. En parte, estos capítulos nos muestran de forma somera lo que se encuentra bajo nuestros pasos y frente a lo que se muestra un arqueólogo día sí, día también.
Su visualización, por tanto, yo la tomo más como un documento más gráfico que de información puramente rigurosa. La visualización de algunos de estos programas divulgativos es por tanto una práctica que es recomendable tomar con cautela, pero que pueden aportarnos toda una serie de datos que de otro modo nos habrían sido imposible de visualizar con nuestros propios ojos.
Nuria Álvarez Garrote
Capítulos de Ciudades bajo tierra
El otro día sin ir más lejos estaban echando uno sobre Roma. Me llamo bastante la atención que el presentador del documental era una especie de Frank de la Jungla pero de las cloacas. No me gusta mucho como hacen los documentales los americanos pero un punto a favor es que por lo menos si que preguntan a especialistas como arqueólogos e historiadores, en este sentido están bien para divulgar y entretener.
ResponderEliminarEn mi opinión también son documentales muy recomendados como decís, puesto que tengo interés en Japón, solo había visto los relacionados con ello y el de Roma. Pero son documentales con una perspectiva muy novedosa, y muchas veces entra en zonas que no están abiertas al público y muestra también en algunos casos el peligro que supone trabajar e investigar en estos sitios.
ResponderEliminar