Como se ha podido comprobar, este año en la facultad de Geografía e Historia se ha estado hablando de un objeto muy particular y su relación con otras artes, concretamente me refiero al astrolabio. Este instrumento tan necesario durante siglos ha sido motivo mas que suficiente para inspirar una obra de increíble factura, el llamado Tapiz del Astrolabio. Considero que después de tanto interés dedicado a esta pieza merezca ser nombrada y examinada con detalle.
Si nos dirigimos a la zona de arte hispano-musulmán que hay en el
Museo Arqueológico nacional, delante de la vitrina del astrolabio existe una introducirnos al mundo de las ciencias musulmanas con una serie
de objetos de la época. Entre los distintos objetos se hace mas hincapié en un
incensario circula, una obra maravillosa y de gran desarrollo tecnológico para
el momento, y en el astrolabio.
Se trata de un elemento clave para calcular la hora del día o
de la noche gracias a los conocimientos astronómicos y a la posición del sol y
de las estrellas. De todos los tipos de astrolabios que existen nos estuvo
explicando el astrolabio planisférico, en el cual se proyecta la esfera celeste
sobre el plano del ecuador. Estos astrolabios suelen estar realizados en bronce
o latón y de unos 15 cm de diámetros, aunque como pudimos comprobar en la última
planta del museo existen unos astrolabios mucho más grandes. Está compuesto por
compuesto por cuatro piezas principales: una caja o "madre" de cinco
láminas que representan distintas latitudes, una red o "araña" con
indicadores para veinticuatro estrellas y una alidada. En el anverso -o
"dorso"- lleva un calendario zodiacal y una escala altímetra
denominada "cuadrado de sombras".
El
Astrolabios se utilizan para mostrar cómo el cielo se ve en un lugar específico
en un momento dado. Esto se hace mediante la plasmación del cielo en una de las
caras del astrolabio y el marcado de modo que las posiciones en el cielo son fáciles
de encontrar. Para utilizar un astrolabio, se ajustan las diferentes partes a
una fecha y hora específicas según el lugar geográfico en el que nos encontremos.
Una vez establecido, gran parte del cielo, visible e invisible, está
representado en la cara del instrumento. Esto permite resolver un gran número
de problemas astronómicos de una manera muy visual. Los usos típicos del
astrolabio incluyen calcular el tiempo durante el día o la noche, para
determinar el tiempo de un evento celeste como el amanecer o el atardecer y las
horas de oracion. Los astrolabios eran también una de las herramientas básicas
de educación en astronomía a finales de la Edad Media. El
astrolabio no era un instrumento de navegación propiamente aunque se usaron
hasta que en el renacimiento se desarrollaría uno para la mar, el denominado
cuadrante que es simplemente un anillo marcado en grados para medir alturas
celestes.
Sabemos
que la historia del astrolabio comienza hace más de dos mil años. Los primeros
astrolabios que se conocen son de antes del año 150 a.C., y se desarrollaron
plenamente antes del año 400. Fue muy desarrollado en el mundo islámico en el 800
y se introdujo a Europa desde la España islámica (Al-Andalus) a principios del
siglo XII. Fue el instrumento astronómico más popular hasta el siglo XVII,
cuando fue reemplazado por instrumentos más especializados y precisos.
Centrandonos ahora en el Tapiz del Artrolabio diremos que como primer punto de la
conferencia, la Doctora Azucena nos presentó la obra, El tapiz del astrolabio,
nos estuvo hablando de su origen desconocido, de su posible tasación cronología
del siglo XV y su emplazamiento actual en el museo de tapices y textiles del a
catedral de Toledo. Como características de la pieza vemos una estructura
tripartita con una central circular, llama la atención la gran cantidad de
personajes con sus nombres, una de las teorías que mantiene es que uno de ellos
representa el primer motor inmóvil del universo, acompañado por dos mujeres y
Atlas.
En la parte superior
podemos observar a dos figuras que representarían dos de las ciencias más
desarrolladas del momento, la filosofía y, cómo no, la astrología. En la parte
inferior tendríamos la geometría y la aritmética, uno de ellos posee un
triangulo que es un cuadrante para hacer cálculos geométricos, la doctora
Azucena mantiene que esto podría hacer referencia al sistema del cadriviun y el
trívium, con las figuras de Virgilio como la literatura acompañado de las matemáticas
y la astronomía.
Atendiendo ahora al centro
del tapiz, la doctora Azucena sugiere que puede ser la imagen del cosmos y hay
una relación con los astrolabios, ahí el nombre. La araña es la forma que tiene
las estrellas y el cosmos, si comparamos la araña con el tapiz vemos que
coincide. En el tapiz no encontramos los punteros típicos de la araña, en lugar
vemos las constelaciones dibujadas, estas constelaciones de agrupaciones
convencionales son puntos que dan una figuración y una iconografía. En el tapiz
vemos que la representación es distinta a los dibujos típicos de las
constelaciones, observamos que solo hay una estrella representada, la que
normalmente se representa en el astrolabio y es la que se marca, dando un
dibujo completamente libre. Hace mención de dos representaciones atípicas como
son la corona austral y la copa, dos intrusos que vemos mal colocados, la copa
esta desplazada y la corona no debería estar puesto que queda después de lo que
abarca el astrolabio, que junto a las dos figuras de los lados, nos muestra una
escena mucho más concreta que rompe toda la temática de la representación, el
resto es matemático y astronómicamente perfecto. Por otra parte es curioso que
no aparezca ninguna representación del zodiaco únicamente en la banda eclíptica
con sus nombres y sus signos
Por último, la doctora
Azucena nos habla del fondo, el superior es un fondo estrellado, pero en la
parte inferior vemos un fondo de flores, esta curva representaría la línea del
horizonte, es el final de la bóveda celeste sobre la posición del observador,
en el tapiz se representa como una línea que separa el cielo de la tierra, con
las estrellas y las flores.
Definitivamente esta
conferencia me pareció sumamente interesante pues no solo nos habla de una
pieza magnifica, sino que nos muestra todo el trabajo anterior, todo el estudio
que requiere la realización de una obra tan compleja como esta. Sin duda lo que
me sugiere esta conferencia es la labor que nos corresponde a los historiadores
del arte para desenmascarar los misterios intrínsecos de las piezas sin
quedarnos meramente en su superficie y ser capaces de hacer un estudio tan
minucioso como el de este tapiz.
Fernando López de Sabando Meijide.